La calidad de una lista de correo es un factor vital para el éxito de las acciones de email marketing, por eso es de gran importancia el momento de adquisición del lead. Existen varios métodos para la adquisición de registros, pero todos exigen la confirmación del usuario de una u otra manera. Hoy hablaremos de tres tres maneras de confirmar este registro: Opt-in, Opt-out y Doble Opt-in.
Listas Opt-out: el usuario pide NO recibir los emails. En un primer lugar se da por hecho que el usuario quiere recibir nuestras comunicaciones y la acción del usuario consiste en darse de baja para dejar de formar parte de la lista. Suele tratarse de datos obtenidos de forma manual (de tarjetas de visita, datos públicos, etc.) sin previo permiso. Esta opción no es recomendable, primero porque legalmente no nos está permitido enviar comunicaciones a usuarios sin previo consentimiento, pero además, en lo que se refiere a resultados, aunque puede partir de un alto volumen de datos, suele resultar en altas tasas de rebote (por que de primeras no sabemos si la dirección de email se usa, sigue existiendo…) y muy baja reactividad.
Listas Opt-in: el usuario pide recibir los emails. En el momento de la suscripción, el usuario da su consentimiento para recibir nuestras comunicaciones, pero no se realiza ninguna comprobación posterior. A pesar de obtener peores resultados en términos de tasas de apertura, clicks y conversiones que el doble opt-in, son las más comunes, dado que el volumen de leads que obtenemos es mayor al ofrecer una menor fricción en el proceso de registro.
Listas Doble Opt-in: el usuario pide recibir los emails y confirma que está interesado. Es la opción que arroja mejores resultados en términos de aperturas, clicks y conversiones y con menores porcentaje de rebote… El usuario realiza un opt-in en una web y después recibe un email que demanda su confirmación. El registro sólo se completa si el email es válido y el usuario muestra un interés real. Sin embargo, la doble confirmación implica una mayor fricción que resulta en que muchos de los registros no se completan y no pasan a formar parte de nuestra lista.
La conclusión sobre qué método escoger siempre viene determinado por los objetivos y recursos concretos de cada campaña. Por lo general, como decíamos, se utilizan listas con Single Opt-In que facilitan el proceso de registro. De esta manera, pese a que las estadísticas del Doble Opt-In son notablemente mejores(aquí tenéis un estudio de Maichimp que lo demuestra), en términos absolutos puede beneficiarnos alcanzar a un gran número de suscriptores.
Es decir, podemos tener una lista de 1000 personas de las que abren los emails 500 (50%) y hacen click 200(20%). O una lista de 100.000 en la que abren 5000(5%) y hacen click 2000 (2%). Las tasas de respuesta son mucho menores, pero en términos absolutos estamos obteniendo mejores resultados.
¿Cuál es vuestra experiencia? ¿Habéis trabajado con ambos tipos de listas?