Una de las maneras más sencillas y a la vez eficaces de maximizar la “visualización” del contenido de un email (open) y la interacción del usuario con el mismo (click), consiste en reenviar el email a aquellos usuarios que no lo abrieron en primera instancia.
Tras una campaña de email marketing, entre el 70% y el 80% de los usuarios que la reciben no abren el email. Se trata de un porcentaje significativo. Los motivos más frecuentes por los que un usuario no abre un email suelen ser:
- No reconoce al remitente
- El asunto le disuade de hacerlo
- No presta atención a nuestro email en ese momento (hay otros emails que sí le llaman la atención)
Para mejorar las aperturas entre los usuarios que se encuentran en el primero de los casos (no reconocen al remitente), el trabajo deber empezar en el momento de la “captación”. Apostar por tácticas de captación que primen la calidad versus la cantidad es un buen comienzo. El reenvío a no abridores es una buena alternativa para inducir a la acción a los usuarios que se encuentran en los dos últimos casos. Para ello disponemos de dos variables con las que operar: el asunto y el momento del envío.
- Cambiar el asunto
Se trata de decir lo mismo de otro modo. Si un usuario no sintió el deseo de abrir un email “neutro” como “Nueva colección de invierno”, a lo mejor reacciona ante un texto imperativo y exclamativo como “Tenemos la nueva colección de invierno. !Descúbrela hoy mismo!. Aquéllos que hayáis llevado a cabo AB test de asuntos de un modo sistemático y riguroso, reconoceréis cómo puede llegar afectar las aperturas una versión frente a otra.
- Cambiar el momento del envío
No siempre sucede que un usuario abre su correo electrónico en un momento propicio para interactuar con nuestro email: puede no disponer del tiempo suficiente para dedicarle atención, el resto de emails con los que “compite” el nuestro se le presentan más interesantes, no se encuentra mentalmente predispuesto a focalizar su atención a ese email, etc… Podemos conjeturar que si un usuario recibió un email el martes a las 09.00 y no lo abrió porque el momento no era el adecuado, si lo vuelve a recibir otro martes a la misma hora tampoco será un buen momento. Siguiendo con el argumento, tiene sentido pensar que un martes a las 15.00 o un miércoles a las 09.00 pueden ser momentos en los que la “situación” del usuario sea otra y más proclive a facilitarle la interacción con el email. Somos conscientes de que estamos en el ámbito de las suposiciones, no de las pruebas o hechos, pero consideramos que son suficientemente razonables como para tenerlas en cuenta.
Para ilustrar una acción de reenvío sobre no abridores, aportamos los datos de una campaña llevada recientemente a cabo para uno de nuestros clientes. Lo que hicimos en este caso fue reenviar la campaña 8 días después a aquellos usuarios que no abrieron la inicial. En este caso concreto, mantuvimos el asunto pero cambiamos el día de envío. Estos fueron los resultados.
Como vemos, hubo 2.764 personas que en el primer envío no se hallaban en una situación facilitadora de la interacción y sin embargo sí que lo estuvieron en el segundo. Por otro lado, es evidente que existe un grupo de usuarios que siguen sin interactuar porque o bien no reconocen al remitente o el asunto les disuadió de hacerlo. En este sentido, es importante valorar CAMPAÑAS de REACTIVACION sobre aquellos usuarios INACTIVOS
Un comentario en “Ejemplo de email marketing: ¿Qué sucede cuando reenviamos un email a no abridores?”