Cuando preparamos el contenido de un email, sobre todo si se trata de un email que busca la venta específica de productos, puede surgir la duda de qué será más eficaz, dirigir el tráfico a la página de producto o hacerlo a la página general de la categoría/colección a la que pertenece ese producto. A priori existen razones que justificarían tanto una como otra alternativa, sin embargo gracias a este AB test hemos visto lo siguiente.
Razones para dirigir el tráfico a la página del producto:
– Reducimos la fricción en el proceso de navegación.
– El usuario ahorra tiempo al no tener que buscar en el catálogo de productos el que le ha llamado la atención en el email.
Razones para dirigir el tráfico a la página de la categría/colección:
– Si el producto clicado en el email no le resulta suficientemente atractivo, en la página de la categoría puede encontrar alguna alternativa que sí le satisfaga.
– Dirigiendo el tráfico a la categoría, estamos dando a conocer al usuario la profundidad de nuestro catálogo, lo que puede tener una incidencia positiva en conversiones fruto de una búsqueda orgánica.
Recientemente hemos llevado a cabo un ejercicio de testeo durante 8 semanas, cuyo objetivo ha sido descubrir si una de estas alternativas generaba más conversiones. Lo que hemos visto es que al dirigir el tráfico a la página del producto, de media se han generado un 80% más de conversiones que al dirigirlo a la página de categoría. Otro dato que hemos podido constatar es que el AOV (average order value) de las compras generadas por usuarios que han visitado la página de categoría, ha sido siempre superior, si bien el revenue total por campaña ha sido siempre mayor en la versión de la página de producto. Es decir, lo que hemos visto es que al dirigir el tráfico a la página de categoría se generaba un número inferior de transacciones pero de importe mayor.
En la medida de lo posible recomendamos llevar a cabo este tipo de testeo, ya que arroja luz sobre aspectos que de otro modo permanecerían invisibles, permitiendo así justificar las decisiones que el departamento de e-commerce lleve a cabo.